En el año 1978, con la licencia de armas para menores, ya realizaba todas las etapas de la recarga excepto la pólvora que la seguía dosificando mi padre.  Hasta que  el año 1993, comienza  a interesarme  la caza mayor y adquiero mi primer rifle, un Remington 7400 en 30-06, y comienzo a recargar con ayuda de Salvador Enguix y su hija Fani que ayudaba a su padre.

Consigo el manual de recarga nº3, de “Rene Malfatti” y es cuando comienza mi aventura en el mundo de la recarga de munición metálica. Al principio para calibres estándares y después mágnum. Ávido de aprender en este interesante campo, no paro de instruirme con distintas publicaciones y consejos de veteranos aficionados, hasta nuestros días que es cuando decido realizar unos proyectiles distintos, libres de plomo y plástico respetuosos con el medio ambiente,   materiales no contaminantes, con resultados muy satisfactorios animándome a patentarlos y comercializarlos actualmente.